REFLEXIONES

                                             
Una contribución de José L Hernández Rodríguez 

Cuando te hallares en compañía, no te extiendas demasiado en contar tus hazañas ni los peligros que has pasado. No has de creer que los demás tengan tanto placer de escucharte como tú tienes gusto de discurrir.
   EPICTETO
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Las palabras deshonran cuando no llevan detrás un corazón limpio y entero. Las palabras están de más cuando no fundan, cuando no esclarecen, cuando no atraen, cuando no añaden.

José Martí
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Pueden ser justas las palabras, pero si son crueles, muerden el alma.

Sófocles

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Cuanto más envejecemos, más necesitamos estar ocupados. Es preferible morir antes que arrastrar ociosamente una vejez insípida, trabajar es vivir.

Voltaire

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Aquellos que niegan la libertad a otros no la marecen para si y bajo un Dios justo no pueden conservarla mucho tiempo.

Abraham Lincoln

                                   MÚSICA MALVADA

Nunca se supo realmente, al menos yo nunca llegué a saber por qué estaba prohibido escuchar esa música en el instituto. Era una cuestión que no estaba escrita en ninguna parte, no había ningún documento que estableciera aquella prohibición, pero existía, estaba siempre presente donde hubiera un grupo de jóvenes que se reunían para idear alguna forma de escucharla y todos la cumplían. 
Casi siempre el equipo para escuchar la música era un viejo tocadiscos de cuerda, pequeño, manuable que de día permanecía escondido y en las horas de la noche, después de la comida, reaparecía y sacaba aquella música increíble de los discos de policloruro de vinilo de 45 revoluciones por minuto. En esa época ya existía todo tipo de tocadiscos eléctricos, automáticos, etc. Pero era obvio que para nosotros aquel tocadiscos de cuerda era una maravilla ya que no necesitaba electricidad y además era pequeño, manuable y se escondía fácilmente en cualquier lugar. Esa noche estábamos emocionado escuchando un sencillo de 45 rpm, ya lo habíamos escuchado varias veces y sin darnos cuenta el volumen era un poco alto y por eso no oímos cuando llegó el instructor. 
El hombre enfurecido se acercó al aparato que estaba en el suelo y sin dar tiempo a explicaciones, plantó su bota enorme de militar sobre el aquello de plástico y la música malvada se convirtió en un crujido de plástico que todavía resuena en mi oído.  
Años después, en otros escenarios y con otras condiciones, tratamos de explicarnos muchas cosas que aun hoy no podemos.
Solo quiero que escuchen esa música, ¡solo escuchen!
 Ahora díganme, ¿por qué esa música fue malvada? Quiero saber. Solo díganme eso.
O ésta otra, hay muchas, creo que son infinitas. Y todas fueron malvadas en un tiempo, ahora nadie sabe por qué lo fueron y eso es lo que yo quiero saber ahora y no sé si sea mucho pedir. Siempre me han dicho que pregunte lo que no sé, que no invente lo que ya está inventado y eso es lo que estoy haciendo y espero que alguien sepa y me diga.

Bueno, esas. O cualquiera otra, son muchas y todas buenas, no, no buenas, magníficas. No se repetirá eso. Lo dudo. Lo hicieron sin saber lo que hacían, se estaban divirtiendo mientras hacían algo verdaderamente excepcional, lo hacían mientras se divertían, lo hacían para que nosotros lo pudiéramos apreciar y no lo sabían y nosotros tampoco lo sabíamos.
Y... ¿qué me dices de ésta?
                           
   ..
continuará                  

                      UNA CAMPAÑA PERFECTA
¿Que si me acuerdo de las campañas políticas de la Cuba de los años cincuenta? Claro que me acuerdo. Mi abuelo era un político, aunque poco exitoso, era un político y como todo político tenía muchos amigos, sobre todo durante la campaña política. Mi abuelo siempre fue de un partido, nunca fue un cambia casaca. tampoco estaba en el partido político que más ventajas le diera, simplemente estaba en su partido político y punto. Aunque todos los partidos fueran la misma porquería.
Pero eso no es de lo que quería escribir. Quería escribir de las reuniones del partido de mi abuelo, durante la campaña de elecciones. El tiempo de campaña era inconfundible, cualquiera, por anormal que fuera sabía que estábamos en campaña, nosotros, que en esa época éramos niños, distinguíamos el tiempo de campaña, nos dábamos cuenta rápidamente por la gran cantidad de gente a caballo que llegaba al caserío, aquel campo que era siempre apacible, se convertía en un verdadero infernal de gente a caballo. Gente bien vestida, gente elegante, con pantalones de montar y sus capas enrolladas y amarradas detrás de las monturas, preparados para si los agarraba un aguacero y no uno a las ancas de otro, no; cada uno en su caballo. Y no eran caballitos, eran caballos criollos escogidos que habían comido de la mejor yerba y caballos árabes. Entonces de buenas a primeras comenzaban a pegar pasquines en los troncos de los árboles, en los postes de las cercas, en los troncos de las palmas reales que crecían a los lados del camino real, en las paredes, etc, que mostraban los nombres y las caras de políticos que habrían de enfrentarse en las elecciones. En ese tiempo les daba por reunirse, se reunían por cualquier cosa, ¿tú ves que ahora la gente se queja de las reuniones? No señor, las reuniones no son un producto nuevo, de ahora, las reuniones son más viejas que cualquier vieja que veas por la calle. Entonces inventaban una reunión y alquilaban el salón de baile del barrio y se reunían ahí y no se sabe la infinidad de cosas que se hablaba en esas reuniones. pero lo importante no es eso, lo importante es que todas las reuniones eran diferentes, pero sí todas terminaban igual. Al final se iban para casa de fulano o para casa de mengano a comer y esa era la parte importante de la cosa, porque nadie quería ser el fulano o el mengano. Y ahí era donde mi abuelo se jodía porque casi siempre iban para su casa. Entonces se sacrificaba algún animal y no un animal chiquito, no, porque para tanta gente un animal chiquito no alcanzaba.
Ese día que les cuento estaban todos en casa de mi abuelo y nosotros dando vueltas entre tanta gente chistosa que llamábamos ocurrentes. Recuerdo que un concejal le decía por quinta vez a mi abuelo que aquella había sido una campaña perfecta. Mi abuelo asentía y miraba a los lados tal vez con la esperanza de que alguien viniera a salvarlo de aquella alcohólica conversación. El concejal, cuando no estaba diciéndole a mi abuelo que aquella había sido una campaña perfecta, caminaba alrededor del sitio donde se encontraban los calderos donde se cocinaban varios guanajos grandes. Y el concejal era un tipo gracioso, nosotros decíamos que era ocurrente, con la botella de cerveza en su mano pasaba cerca de un caldero y vaciaba cerveza, a la vez que decía; -Tú no te ablandarás, carajo, pero te vas a emborrachar. Y del tiempo de campaña política recuerdo muchas cosas, tal vez un día pueda contarlas. Recuerdo que a nosotros nos daban los pasquines para que fuéramos pegando por donde nos diera la gana, teníamos una especie de autorizo para ir pegando en todos los troncos que encontráramos y caminábamos todo el caserío y más allá, donde nunca pudimos pegar pasquines fue en casa de Eduvige, el viejo nos miraba una sola vez y balbuceaba: -Les vo pegá un papé a cada un en su cu... Y a nosotros nos aterraba la idea de llegar a la casa con un pasquín pegado en aquel lugar. Y algunos pasquines eran fotos de políticos que tenían barba, otros bigotes, algunos a caballo, habían pasquines que tenían impresas las promesas que estaban acostumbrados a hacer aquellos personajes y que nosotros sabíamos que eran mentiras. Pero los pasquines eran muchos y no había ya donde pegar más y sobraban y esos nosotros nos los llevábamos para la casa porque sabíamos que en la casa iban a jugar algún papel y el principal papel que iban a desempeñar era precisamente ese mismo; el de ser papel. Y era fácil votar porque de eso se encargaba mi abuelo que recogía todas las cédulas el día de la votación y bien temprano se lanzaba a caballo para Calabazar. Y un tiempo después nos enterábamos quién era el nuevo alcalde o si seguía siendo el mismo y quienes habían salido de concejal y nos alegraba mucho que el concejal que quería emborrachar al guanajo y que decía que aquella había sido una campaña perfecta, volviera a ser electo, porque así lo íbamos a ver de nuevo en la próxima campaña. Y después que todo terminaba y los pasquines se iban cayendo por efecto de la lluvia y el sol iban apareciendo otras caras que no eran las originales, nosotros nos divertíamos muchísimo adivinando a quienes se parecían las nuevas caras, hasta que los papeles se acababan de caer a pedazos, mientras que en el escusao de la casa se conservaban en buen estado e iban siendo utilizados según la necesidad y nosotros nos divertíamos embarrando sus políticas caras  mientras nos mostrábamos unos a otros qué parte de la cara habíamos embarrado y nos daba mucha risa cuando era la boca del político. Años después, cuando las elecciones cambiaron de forma y de objetivo, nosotros extrañábamos mucho la pegadera de pasquines por todas partes y sobre todo que ya no hubiera tanto papel disponible. Porque ¡mira que en una letrina sanitaria de una finca se necesita papel!
Después de la fiesta revisábamos todas las botellas de cerveza y vino tinto. Era la única manera que teníamos de probar aquella cosa. Nuestra madre no nos dejaba probar nada de forma autorizada, así que teníamos que ingeniárnosla. Y siempre estaba con el miedo de que abriéramos una pepsicola porque se le podía romper el pico de la botella y caer dentro algún pedacito de vidrio. Nos inculcó el miedo de que un pedacito de vidrio nos rajara una tripa y de vez en cuando uno se imaginaba a alguien con una tripa rajada.
Me acuerdo que una vez mi hermana menor nos mostró la cara de un político en un pasquín toda embarrada de una cosa roja. Mi mamá se alarmó muchísimo y nosotros también y ahí mismo comenzó una investigación exhaustiva hasta que hubo que decir que habíamos estado tomando las sobras de las botellas y nosotros solo pensábamos en los azotes, pero no, lo que pasó fue que decomisó el pedazo de papel y se pusieron a ensillar los caballos.
Después nos enteramos que el médico tomó una muestra de lo que botaba mi hermana y aparte de reírse mucho al ver la cara en el trozo de papel, dijo: ¡amebas!... ¡amebas coli!. continuará...

                                                EMIGRANTE

Emigrante se le dice a aquel que traslada su lugar de residencia. Y cuando dicen aquel se refieren casi siempre a personas. Ahora, yo te pregunto: ¿pueden las cosas emigrar? Yo creo que sí. Las cosas, las instituciones, las organizaciones también emigran. Y ¿alguien tiene derecho a determinar quién puede emigrar y quién no? Yo estimo que no. Cada cual tiene derecho a emigrar ya sea por una causa o por otra. No se puede obligar a nadie ni a nada a permanecer en contra de su voluntad en un determinado lugar. No se le puede decir a nadie ni a nada quédate ahí porque tú naciste ahí. Ejemplos de personas que han emigrado hay millones, siempre los hubo. Ejemplos de cosas que emigraron también. Ejemplo de instituciones y organizaciones que emigraron también hay muchos y a todos y todas hay que aplicarles la misma ley; no hay ley contra eso. La única ley que se pudiera aplicar para evitar la emigración es dar el ejemplo, es decir ; no emigrar y eso no es una ley. Durante mi niñez vi cómo la gente y las cosas emigraban y que después viniera aquello de que se prohibiera emigrar a ciertas ciudades y que inclusive se promulgaran leyes al respecto. Y después me preguntaba ¿cómo había empezado eso? Si los que no querían la emigración habían sido los primeros que emigraron. O si no, pregúntate a ver, ¿dónde nació Radio Rebelde? En la Sierra Maestra. Y ¿por qué no se quedó allí? Su hogar y su territorio estaban allí. ¿Dónde mejor que en la Sierra Maestra iba a estar Radio Rebelde? ¿Por qué tenía que ir en la invasión? O mejor ¿por qué después de que invadió la Habana no regresó más a sus raíces? Después de todo, tú haces una transmisión aquí y se oye en casa del cara... y se puede retransmitir, no tienes que trepártele encima a nadie para que te oiga, lo único que necesita es un radio. Siempre me gustó el tema de Radio Rebelde cuando hablaban de emigrantes. Me habría gustado que Radio Rebelde hubiera permanecido allí, donde nació, o al menos en alguna ciudad cercana, se hubiera visto mucho más elegante, habría tenido mucha más fuerza expresiva, hubiera convencido más. Pero no, se convirtió en un emigrante más. Y me pregunto también,¿será que nunca tenga que volver a sus raíces? continuará...

                  LA IGLESIA Y EL CORONAVIRUS

En la ciudad donde vivo ahora hay una iglesia católica.que funcionaba normalmente: hacía sus misas, hablaba de catequesis, sonaba las campanas, se veían curas y monjas caminando de aquí para allá todo el día, reclamaban sus diezmos, etc. El asunto es que con la llegada del coronavirus comenzaron a modificar sus costumbres y ocupaciones. En un momento se dijo que la misa se iba realizar sin público, que se pondrían bocinas y altavoces para interactuar con los fieles, que se cantarían villancicos y demás canciones como habitualmente se hacía, pero por los altoparlantes.
El caso es que todo comenzó muy bien, yo diría que requetebién. Se podía escuchar la misa hablada por alguien que no se veía, los cantos interpretados por coros cuyas personas no se veían. Las campanas tañían en los horarios cada seis horas y también cada seis horas se escuchaban diez minutos de villancicos y otras melodías religiosas y recuerdo que el turno de las doce am resultaba indeseable, pero se podía soportar, no así el turno de las seis am que no te dejaba terminar de dormir precisamente en esa hora que más friecito hay, primero sonaban las campanas y después mandaban la musiquita. 
Por suerte todo aquello fue cambiando con el decursar de la pandemia. Primero se perdieron las misas, después se fueron perdiendo los curas y las monjas, porque ya no se les veía caminando de aquí para allá tratando de salvar alguna alma perdida. Fueron faltando las musiquitas y las campanas de los horarios nocturnos y después de los diurnos. Las seguidillas desquisiantes de repeticiones de alabanzas fueron quedando en el olvido, hasta llegar a los días de hoy en que no se escucha absolutamente nada. Hace unos días pasé por frente a la iglesia, vi todas las ventanas cerradas, las áreas empolvadas y con papeles en el piso, la oficina donde siempre veía movimiento de dinero, cerrada, la casa parroquial cerrada y sin señales de vida humana y en la puerta principal un candado de los grandes.
No estoy claro de la conveniencia de que haya menos ruido, sobre todo por la noche, tampoco estoy claro de qué haya pasado en realidad. Tal vez se hayan enfermado y por eso no estén atendiendo al rebaño.
Las ovejas no estamos bien en conocimiento de los pormenores internos de esa organización, lo único que sabemos es que se han desaparecido cuando más falta nos hacían. Tal vez debieron jugar un papel mucho más protagónico en un tiempo donde de verdad el pueblo necesitaba algo más que ruido. Sigo pensando que es verdad que en las grandes crisis, cuando más peligro estás corriendo, es donde conoces al que de verdad  te puede ayudar y no lo hace y al que realmente te ayuda aunque no pueda. Es verdad que se han perdido, es verdad que no puedes contar con ellos, pero también es verdad que ahora podemos dormir mejor. 
Por increíble que parezca, hoy 20 de septiembre de 2020, comenzaron a tocar las campanas de la iglesia, a tañer, como dirían nuestros antepasados. Todavía no sé si será misa, procesión, muerto, o qué, pero lo cierto es que recordaron que había iglesia. porque yo estaba ya por pensar que iglesia era solo un simple apellido.  
                               
                               CUBA Y EL CORONAVIRUS

 ¿De verdad que ustedes creyeron que en Cuba los muertos iban a estar a telera? No creo que sean tan ignorantes. Hasta publicaron en caralibro un gif que era en forma de cabeza de pez o de coronavirus, algo así, que le decía a los cubanos que se cuidaran que se los iba comer a todos. Era cuando aquello de que empezaba a llegar la pandemia, porque Cuba fue de los últimos países en cerrar la entrada de personas. Por cierto que el pez en cuestión tenía un aspecto macabro y la voz era más macabra todavía... le digo al pez: -Pez, te quedaste con hambre, pensaste que te comerías muchos cubanos y no fue así, si tanta hambre tenías debiste haberte ido para los EEUU, ¡ahí si que hubo muertos!... O debiste darte un paseíto por Guayaquil. Ahí hubo de todo: gente que iba caminando por la calle y de pronto caían al suelo y no se paraban más; morían de asfixia, porque no había capacidad de cuidados intensivos en los hospitales, ni siquiera camas disponibles había en las salas de los hospitales a donde iba la gente común y los cadáveres eran unos pocos al principio, pero después eran muchos, muchísimos y demoraban para recogerlos de las calles o de las propias casas y hubo familias que tuvieron a sus muertos dentro de la casa varias semanas porque nadie venía a recogerlos; ni los bomberos, ni la policía, ni criminalística, ni los de medicina legal y cuando comenzaron a recoger los cuerpos que estaban tirados en la calle los iban colocando en contenedores porque también para ese entonces ya eran muchos los muertos de los hospitales que también los estaban almacenando en contenedores porque los cementerios no daban abasto por tanto muerto y los sarcófagos también se  agotaron y tuvieron que empezar a enterrar gente en cajas de cartón. ¡Sí eñor, en cajas de cartón! como dicen por ahí. Y los muertos ya eran tantos que las cifras se confundieron y ya nadie sabía cuantos muertos había en realidad. Y empezaron a calcular comparando cifras de enterramientos de años anteriores, pero todavía había muchos contenedores. Y a las familias que habían perdido sus seres queridos en los hospitales no se les entregaban los cuerpos porque en realidad no sabían en cual contenedor estaban y sabían que estaban muertos pero no sabían donde estaban. Y en eso también ocurría que entregaron cenizas a las familias, de personas que después estaban vivas y se habían recuperado en los hospitales y eso no fue todo; emitieron comunicaciones a las familias de dónde estaban enterrados los cuerpos de sus parientes y a los pocos días los parientes aparecían ingresados en centros hospitalarios y aún hoy hay personas buscando los cadáveres de sus familiares que murieron en los hospitales y dudo que algún día alguien los ayude a encontrarlos, tal vez con análisis de adn. Supongo que ya eso será una tarea del próximo gobierno, digo, si es que eligen un gobierno que tenga vergüenza. Y hubo muchas familias que optaron por dejar tirados sus muertos en la calle para ver si así las autoridades se los llevaban para sepultarlos. Mira, pez horrible, tú no sabes nada, en Guayaquil hubo que proyectar y ejecutar en tiempo record tres cementerios, eso así se dice fácil, ¿pero de verdad tú sabes lo que son tres cementerios? ni te lo imaginas... tres hoteles es otra cosa, pero ¿tres cementerios?... Y entre todas esas cosas hay gente aprovechada... en ese entonces surgió el negocio de los muertos; a ti se te había muerto el padre y lo querías recuperar para darle cristiana sepultura y los que estaban a cargo de los contenedores te decían que eso te costaba 200 dólares, solo por meterte en un contenedor repleto de cadáveres a ver si tenías la suerte de dar con él... es decir, que tenías que comprar el cadaver de tu padre... ¿ves eso justo, pez de porquería? Bueno, eso no era en Cuba, ya te dije donde era... y todavía me queda mucho por contarte. 

                                    COSAS DE COMIDAS

Un amigo llamado Antonio Hernández (Tony), me dijo que cuando come huevos le cae como una patá en el hígado y cuando come hígado le cae como una patá en los huevos. 

                                     CANALES DE TV  

¿De qué te sirve tener tantos canales de televisión si cuando hace falta ver o leer alguna noticia no aparece por tv?. Sí, amigo. Los canales de tv transmiten lo que a los dueños le conviene, claro, si son canales privados, tienen un dueño y cuando hay una noticia que al dueño no le gusta, simplemente callan, así como lo oye. En Ecuador , en octubre de 2019 hubo un alzamiento, de ese alzamiento los canales de tv no transmitieron absolutamente nada, Así como lo oye, uno quería informarse de la situación del país y buscaba en los canales de tv y solo veía muñequitos. Muchos muñequitos, muñequitos de todo tipo; muñequitos grandes, muñequitos chiquitos, muñequitos hablando en inglés, en francés, pero nada de lo que estaba sucediendo en las grandes ciudades. Y cuando transmitían algo era para hacer algún tipo de campaña. Por ejemplo; cuando el pueblo se cansó de que cierta televisora no publicara nada la agredió, destruyéndole algunos equipos. Entonces sacaron esa noticia porque el pueblo era un vándalo y no es que estuviéramos de acuerdo con esa acción porque destruir un equipo o instalación es inaceptable, pero también es inaceptable que se publicara solo para denigrar al pueblo. Es igual que sábado y domingo que en esos días los canales no transmiten nada, es como si en fin de semana no pasara nada.   
                                 
                                                  ESTOY OCUPADO 

Eso Ud lo puede decir a un amigo, a un familiar, a un vecino, a un intruso, pero ¿Ala muerte? No, a la muerte no le vas a poder decir eso. Cuando la muerte venga a por ti no vas a poder dar una disculpa; ¡espérese que estoy terminando esto! ¡Un momento, doña muerte, déjeme terminar esto que estoy haciendo y enseguida me voy con Ud! Espérese doña muerte, le juro que yo quisiera ir con usted, pero me es imposible, mire doña muerte yo sé que ud ha gastado muchos recursos en venir por mí y mucho más ahora en tiempo de pandemia que han suspendido el funcionamiento del transporte público, cerrado todas las gasolineras, elevado los precios de todos los combustibles, retirado de los mercados los productos de segunda y tercera necesidad, pero yo necesito terminar de arreglarle la lavadora a mi mujer que tiene que lavar un bulto enorme de ropa porque se le ha roto hoy y ayer hubo apagón casi todo el día, así que termino esto que estoy haciendo y enseguida estoy con usted... en fin , toda esa serie de disculpas que solemos dar a nuestros semejantes. ¿De veras que alguna vez has pensado decirle a la muerte: Estoy Ocupado?

                                 CURIOSIDADES DEL IDIOMA CASTELLANO 
De José Antonio  (Tony)

 Con 23 letras, se ha establecido que la palabra
Electroencefalografista es la más extensa de todas las aprobadas por
la Real Academia Española de la Lengua.

En el término Centrifugados, todas las letras son diferentes y
ninguna se repite.
  
La palabra Oía tiene tres sílabas en tres letras.
  
En Aristocráticos, cada letra aparece dos veces.

 El vocablo Cinco tiene a su vez cinco letras, coincidencia que no se
registra en ningún otro número.

 El término Corrección tiene dos letras dobles...
  
Las palabras Ecuatorianos y Aeronáuticos poseen las mismas letras,
pero en diferente orden.
 
El término Estuve contiene cuatro letras consecutivas por orden
alfabético: s-t-u-v.
  
Con nueve letras, Menstrual es el vocablo más largo con solo dos sílabas.

La palabra Pedigüeñería tiene los cuatro firuletes que un término puede tener en nuestro idioma: la virgulilla de la ñ, la diéresis sobre la ü, la tilde del acento y el punto sobre la i.

El vocablo Reconocer se lee lo mismo de izquierda a derecha que
viceversa (palíndromo).

La palabra Euforia tiene las cinco vocales y sólo dos consonantes...

  Y ya para acabar:

Otra curiosidad del Castellano (español):

LAS CINCO VOCALES

La famosa escritora española Lucía Echevarría, ganadora del Premio Planeta 2004, dijo en una entrevista, que "murciélago" era la única palabra en el idioma español que contenía las 5 vocales.

Un lector, José Fernando Blanco Sánchez, envió la siguiente carta al director del diario ABC:

Acabo de ver en la televisión estatal a Lucía Echevarría diciendo que, "murciélago" es la única palabra en nuestro idioma que tiene las cinco vocales.

Mi estimada señora:

Piense un poco y controle su "euforia". 

Un "arquitecto" "escuálido", llamado "Aurelio" o "Eulalio", dice que lo más "auténtico" es tener un "abuelito" que lleve un traje "reticulado" y siga el "arquetipo" de aquel viejo "reumático" y "repudiado", que "consiguiera" en su tiempo, ser "esquilado" por un "comunicante", que cometió "adulterio" con una "encubridora" cerca del "estanquillo", sin usar "estimulador".

Señora escritora, si el "peliagudo" "enunciado" de la "ecuación" la deja "irresoluta," y piense de modo "jerárquico".

No se atragante con esta "perturbación", que no va con su "milonguera" y "meticulosa" "educación".

Y repita conmigo, como diría Cantinflas:
¡Lo que es la  ignorancia!

Solo me queda recomendarle que se refresque con hojas de "eucalipto"...

¡Demasiado bueno como para no compartirlo..!

Un Gallego llegó a un programa de preguntas y respuestas, fue descalificado en la quinta pregunta.

Las preguntas que le hicieron fueron las siguientes:

1. ¿Cuánto tiempo duró la guerra de los cien años?

a.      140 años
b.      116 años
c.       99 años
d.      100 años

El Gallego, pidió pasar a la siguiente pregunta.

2. ¿En qué país se inventó el sombrero panameño?

a.      Panamá
b.      Brasil
c.      Ecuador
d.      Chile

El Gallego pidió asesorarse con un amigo por teléfono.

3. ¿En qué mes fue la revolución de octubre?

a.      Noviembre
b.      Octubre
c.      Enero
d.      Septiembre

El Gallego pidió 50:50

4. ¿Cuál era el nombre del Rey Jorge VI?

a.      Alberto
b.      Jorge
c.      Simón
d.      Enrique

El Gallego pidió la ayuda del público.

5. ¿A nombre de qué animal recibieron su nombre las Islas Canarias?

a.      Canguro
b.      Perro
c.      Canario
d.      Pavo

El Gallego fue descalificado.
¿Y ustedes mis queridos amigos, sabían las respuestas?

RESPUESTAS
⬇⬇

La guerra de los cien años duró 116 años.

El sombrero panameño, se inventó en Ecuador.

La revolución de octubre, sucedió en el mes de noviembre.

El nombre del Rey Jorge VI era Alberto, y se lo cambió en 1936.

El nombre de las Islas Canarias proviene de la palabra latina can, que significa perro, y esto es por la gran cantidad de perros salvajes que había en la Isla.

Ahora, deja de burlarte del Gallego, que a ti, también te hubiesen descalificado.

Pásalo.
Reir es muy bueno (receta médica)...para pasar una cuarentena amena!

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